Todas hemos sentido celos alguna vez. Cuando nos atacan, perdemos de vista la realidad y nos ofuscamos por cualquier cosa. Empezamos a dudar de todo, especialmente de las personas que más amamos.
Asume tus culpasNo siempre debes culpar ni a tu pareja ni a la tercera persona, ya que nosotras somos responsables de nuestros actos. Intenta cambiar la manera de percibir la situación y tomarás en tus manos el autocontrol.
Equilibra tus salidasEstá bien que tengas muchos amigos, pero no abuses. No es necesario que salgas con ellos todas las semanas y menos si eres la única mujer del grupo.
Trabaja la confianzaDebemos evitar los pensamientos negativos y sobre todo los que son destructivos, ya que lo único que hacen es alimentar los celos. Para poder trabajar este punto lo que haremos será que cada vez que surja un pensamiento de este tipo lo cambiaremos por otro que nos aporte seguridad y confianza.
Evita hacerte la víctimaNunca utilices la tragedia para sumir los celos, es decir, nada de ponernos como una víctima porque ésta no es la forma de solucionarlos. Los celos son algo normal en una medida adecuada, en el momento que veamos que se nos pueden ir de las manos, debemos controlarlos.
Dale seguridadIntenta que se sienta seguro de su relación, mostrando lo bien que están juntos, pero sin dar explicaciones de lo que haces constantemente. Aclara desde el principio cualquier situación que te pueda llevar a crear una sospecha más.
No seas tan coquetaA todas las mujeres nos gusta llamar la atención, mirarnos en el espejo y cuidarnos para sentirnos bien con nosotras mismas y dar una buena imagen. Pero si se está en pareja se debe tener en cuenta no exceder los límites y redundar en una coquetería demasiado explícita, ya que nuestra actitud puede arrastrar consecuencias en el hombre.
Sé tú misma, pero con inteligenciaVivir con un celoso no es nada fácil, pero no por ello debes dejar de hacer tu vida. Si eres una chica sexy, vístete igual de sensual que cuando sales con él que cuando lo hagas con tus amigos. Si cambias el modo de vestir podría despertar las sospechas.
Contéstale con seguridadSi te interroga, contéstale tranquila dónde has estado, con quién has ido, qué has hecho. Pero atención, no accedas a su chantaje si te pide que no lo hagas más. Debes estar segura y firme de que tu independencia es primero.
No consientas ninguna agresiónHay escenas de celos que pueden acabar mal. Para evitarlo, no debes consentir ni un mínimo de agresividad a tu compañero. Vigila el menor atisbo de violencia y si ves que con él no se puede hablar, es momento de dejarlo.
Controla tu iraCuenta hasta diez antes de montar una escena, vociferando y rompiendo todas las fotografías y recuerdos del amor que se fue. Si lo prefieres, compra un saco de boxeo y golpéalo con fuerza a lo “Million Dollar Baby”.